
Soñé que mi mirada se perdía
sobre un manto de espinas
que cogía con mis manos
y lo abrazaba a mi cuerpo,
para que cada suave tallo
pusiera mi mente en blanco.
Aguanté las ganas que mi mente
pedía por encontrar tu alma;
quería ir con ella, agarrarla,
seguir el camino hasta tu cama,
no encontrarse, sino en tu casa
y no rendirse, una vez bajo tu sábana.
Oía sus gritos, los de mis cuerdas vocales,
como las de un grillo sin terminar sus rituales
rogando la vida junto a tu vida, sin achaques,
buscando tu aroma alrededor del parque
tan acostumbrados a permanecer sin tus labios,
los incansables labios por buscar descanso.
Entretanto, una noche fría
en la que notaba
que nuestra llama ardía
en la que rogaba
que tu cuerpo pidiera
cada trozo de vida
que el sueño dejaba
olvidado en la hierba.
Precioso, y eso que la poesía no es lo que más me fascina. Me gustan más los relatos breves o no tan breves.
ResponderEliminarPara ser periodista no hace falta ser agresivo, hay muchos profesionales que lo hacen con un bolígrafo, ahora con ordenador. Solo hay que tener un sueño e ir a por él.
Un abrazo.
Qué maravilla...hay arte y sentimiento en todo y cultura y interés por el mundo y y....mucho que admirar por parte mía!!!Aquí tienes ya unaseguidora y ahora mismo le hago llegar el blog a mi hija Nuss!!
ResponderEliminarUn abrazo, desconocida...y adelante!!
Aquí está la hija Nuss, en realidad me llamo Núria y me gusta tanto mi nombre como tu musica. La primera vez que la he escuchado ha sido teniendo una videoconferencia con mi madre y luego he puesto tu lista a reproducir mientras leía The Great Gatsby, un libro ejemplar. El poema también muy bonito, me encantaría saber rimar como lo haces tu.
ResponderEliminarMuchos besos.
P.D.: Espero que no seas filemafóbica.